Cuando se trata de comparar jerbos y hámsteres, el tamaño es un factor clave. Si bien ambos son pequeños roedores que comúnmente se mantienen como mascotas, existen algunas diferencias en su tamaño que vale la pena señalar. En términos generales, los jerbos son un poco más grandes que los hámsteres y pesan alrededor de 2 a 4 onzas en comparación con el peso promedio de un hámster de 1 a 2 onzas. Además, los jerbos tienden a ser más largos y delgados que sus homólogos hámster. Por supuesto, hay muchas especies y razas diferentes tanto de jerbos como de hámsteres, por lo que es posible encontrar individuos que se aparten de estas generalizaciones. Sin embargo, como regla general, si buscas un roedor un poco más grande como mascota, un jerbo puede ser la mejor opción.